Tenemos la convicción de que un gran proyecto no está determinado solamente por el resultado, sino por su desarrollo. Buscando coherencia entre consideraciones financieras, técnicas, medioambientales y aspectos sociales. Yendo más allá de lo que es exigido por la regulación medioambiental, tomando responsabilidad por nuestra huella. Tratando de ser humildes para acoger la sabiduría, conocimiento y preocupaciones de las comunidades locales, ya que terminará mejorando el proyecto.
Construir confianzas toma tiempo: empezamos temprano, decimos las cosas como son, nos vamos a vivir a las comunidades, fijando las bases para relaciones de largo plazo.